lunes, 22 de marzo de 2010

“¿Quién me ha robado el mes de abril?”


Foto tomada por mi querida amiga Bele, otra enamorada de las jacarandas en flor.


Cuando estaba a punto de hacerme esta pregunta –con permiso del cantante Joaquín Sabina-, apareció la primavera en Madrid. Los madrileños y quienes vivimos en este lado del mundo creíamos que el equinoccio primaveral ya nos había olvidado. El invierno se resistía a dejarnos; los termómetros parecían averiados de por vida o ateridos por el frío. ¡Vaya usted a saber!
Los nativos de estas tierras no recordaban un invierno tan crudo. El “agosto” fue para los administradores de las estaciones de esquí de los alrededores de la capital española que hacía mucho tiempo no disfrutaban de una temporada tan próspera como ésta. Para nuestra fortuna, la primavera arribó, ¡por fin!, a través de las verdes hojitas de los plátanos, del trino de los pájaros y de un sol que ya empieza a calentar. ¡Cómo se echan de menos las jacarandas en flor del parque México!

1 comentario:

santidepaul dijo...

Eyyyyy Laura: que sea bienvenida la primavera. Lástima que aquí no tengamos esas trajineras tan estupendas porque si no, nos íbamos a pasar una genial tarde primaveral en barquito.